Te sientas en la mesa, mirás el menú, pides, el mozo te trae la comida, comés, pagás y te vas. Muy lindo esto de ir a comer a un restaurante, pero… ¿no es al final un poco aburrido todo esto? Si además de alimentarte, buscás una experiencia bizarra, tentate con estos restaurantes, los más raros del mundo.
1. Para comer como en la cárcel: THE JAIL En este restaurante de la ciudad de Taipei, las mesas están rodeadas por rejas y los platos se sirven en esas palanganas chatas como las que usan los presos para orinar. Algunos comensales inclusive disfrutan ser maltratados por los mozos, vestidos de guarda cárceles, que de tanto en tanto sueltan un fustazo displicente para poner orden.
2. Para comer como en el baño: THE MARTON
Otra locura de Taipei. The Marton está ambientado como si fuera un baño, con mingitorios, inodoros y otros objetos representativos. Las mesas tienen forma de bañadera y la gente se sienta en inodoros para comer. Claramente, este no es un sitio para una primera cita.
3. Para comer bajo el agua: ITHAAQuien tenga el privilegio de viajar a las Maldivas debe conocer este restaurante en pleno océano Índico. Situado a cuatro metros y medio bajo la superficie del mar entre arrecifes de coral, el comedor submarino tiene capacidad para 14 personas que comen bajo la mirada atenta de peces, escualos, pulpitos y langostas. Los mismos animales marinos que luego se sirven al plato acompañados de aderezos y ensaladas y a un precio promedio de 120 dólares por cubierto.
4. Para comer como en un hospital: THE CLINICEste restobar de Singapur está distribuido en diferentes cuartos con mesas iguales a las que se utilizan en las salas de operaciones y sillas de rueda en lugar de sillas comunes. Se puede cenar con cacerolas quirúrgicas con forma de riñón y beber en probetas. La cocina de este local es la reproducción calcada de un quirófano y el chef viste como cirujano. A tono con la temática, a la hora de traer la cuenta… te operan.
5. Para comer rodeado de forros: CABBAGES AND CONDOMSSi vas a Tailandia y pasás por Bangkok, no te pierdas este restó donde el elemento decorativo por excelencia es nuestro gran amigo el condón. Un espacio muy cool, con luces tenues y preservativos multicolores de distintos tamaños por todos lados. Por más que parezca una idea frívola se trata de un proyecto muy serio de la Asociación para el Desarrollo de la Población de Tailandia, cuyo objetivo es el control de los nacimientos y la lucha contra el sida en ese país.
6. Para comer y que la comida te caiga mal: HEART ATTACK GRILLUn restaurante para el infarto, literalmente. Si estás cansado de la comida light, andá a Chandler, Arizona y pedite una de las hamburguesas de este lugar cuyo slogan es “un sabor por el que vale la pena morir” y donde las camareras están vestidas como enfermeras hot. Los patys (llamados by-pass burgers) son fritos en grasa de cerdo y llegan a tener hasta 8000 calorías. Si pesás más de 150 kilos, comés gratis. Y si te pedís un cuádruple by-pass (con cuatro patys) y te lo terminás, te llevan hasta tu auto en silla de ruedas (en serio).
1. Para comer como en la cárcel: THE JAIL En este restaurante de la ciudad de Taipei, las mesas están rodeadas por rejas y los platos se sirven en esas palanganas chatas como las que usan los presos para orinar. Algunos comensales inclusive disfrutan ser maltratados por los mozos, vestidos de guarda cárceles, que de tanto en tanto sueltan un fustazo displicente para poner orden.
2. Para comer como en el baño: THE MARTON
Otra locura de Taipei. The Marton está ambientado como si fuera un baño, con mingitorios, inodoros y otros objetos representativos. Las mesas tienen forma de bañadera y la gente se sienta en inodoros para comer. Claramente, este no es un sitio para una primera cita.
3. Para comer bajo el agua: ITHAAQuien tenga el privilegio de viajar a las Maldivas debe conocer este restaurante en pleno océano Índico. Situado a cuatro metros y medio bajo la superficie del mar entre arrecifes de coral, el comedor submarino tiene capacidad para 14 personas que comen bajo la mirada atenta de peces, escualos, pulpitos y langostas. Los mismos animales marinos que luego se sirven al plato acompañados de aderezos y ensaladas y a un precio promedio de 120 dólares por cubierto.
4. Para comer como en un hospital: THE CLINICEste restobar de Singapur está distribuido en diferentes cuartos con mesas iguales a las que se utilizan en las salas de operaciones y sillas de rueda en lugar de sillas comunes. Se puede cenar con cacerolas quirúrgicas con forma de riñón y beber en probetas. La cocina de este local es la reproducción calcada de un quirófano y el chef viste como cirujano. A tono con la temática, a la hora de traer la cuenta… te operan.
5. Para comer rodeado de forros: CABBAGES AND CONDOMSSi vas a Tailandia y pasás por Bangkok, no te pierdas este restó donde el elemento decorativo por excelencia es nuestro gran amigo el condón. Un espacio muy cool, con luces tenues y preservativos multicolores de distintos tamaños por todos lados. Por más que parezca una idea frívola se trata de un proyecto muy serio de la Asociación para el Desarrollo de la Población de Tailandia, cuyo objetivo es el control de los nacimientos y la lucha contra el sida en ese país.
6. Para comer y que la comida te caiga mal: HEART ATTACK GRILLUn restaurante para el infarto, literalmente. Si estás cansado de la comida light, andá a Chandler, Arizona y pedite una de las hamburguesas de este lugar cuyo slogan es “un sabor por el que vale la pena morir” y donde las camareras están vestidas como enfermeras hot. Los patys (llamados by-pass burgers) son fritos en grasa de cerdo y llegan a tener hasta 8000 calorías. Si pesás más de 150 kilos, comés gratis. Y si te pedís un cuádruple by-pass (con cuatro patys) y te lo terminás, te llevan hasta tu auto en silla de ruedas (en serio).
7. Para comer en la nubes. DINNER IN THE SKY.
Esta propuesta nació en Bruselas, Bélgica, y ya tiene sucursales en 12 ciudades del mundo (Barcelona, Nueva York e incluso Santiago, en Chile, entre otras). Se trata de una plataforma que se eleva con una grúa a 50 metros de altura. Tiene capacidad para 30 comensales. Para personas que no sufren de vértigo. Cuesta 150 euros por persona.
Esta propuesta nació en Bruselas, Bélgica, y ya tiene sucursales en 12 ciudades del mundo (Barcelona, Nueva York e incluso Santiago, en Chile, entre otras). Se trata de una plataforma que se eleva con una grúa a 50 metros de altura. Tiene capacidad para 30 comensales. Para personas que no sufren de vértigo. Cuesta 150 euros por persona.
8. Para comer como en un cementerio: VAMPIRO CAFE
En Tokio, Japón, este restaurante mete miedo. Se caracteriza por estar pintado de rojo y por estar adornado por decenas de calaveras. La comida, incluso, se sirve sobre pequeños ataudes. Realmente desagradable, es preferido por jovenes darks. Toda la comida se sirve a medio cocer, o sea que las carnes llegan a la mesa bien rojas. El punto justo para amantes de los vampiros.
En Tokio, Japón, este restaurante mete miedo. Se caracteriza por estar pintado de rojo y por estar adornado por decenas de calaveras. La comida, incluso, se sirve sobre pequeños ataudes. Realmente desagradable, es preferido por jovenes darks. Toda la comida se sirve a medio cocer, o sea que las carnes llegan a la mesa bien rojas. El punto justo para amantes de los vampiros.
9. Para comer como en una iglesia: CHRISTON
Otra perlita japonesa, que también está está ubicado en Tokio, donde el culto a la bizarrez no tiene límites. Este establecimiento recrea la estética de una iglesia católica, con altares, vitreaux y figuras religiosas por todas partes. Las camarares están vestidas como vírgenes y los mozos como sacerdotes.
Otra perlita japonesa, que también está está ubicado en Tokio, donde el culto a la bizarrez no tiene límites. Este establecimiento recrea la estética de una iglesia católica, con altares, vitreaux y figuras religiosas por todas partes. Las camarares están vestidas como vírgenes y los mozos como sacerdotes.
10. El más impersonal: BAGGERS
En Alemania. Es el primer restaurante en el mundo sin camareros. Los clientes tienen una pantalla táctil en cada mesa para hacer su pedido, pagan con tarjeta de crédito mediante un posnet que también está ubicado en la mesa y unos minutos después la comida llega en forma automática a través de un mecanismo que transporta los platos directamente desde la cocina. Queda en Nuremberg.
En Alemania. Es el primer restaurante en el mundo sin camareros. Los clientes tienen una pantalla táctil en cada mesa para hacer su pedido, pagan con tarjeta de crédito mediante un posnet que también está ubicado en la mesa y unos minutos después la comida llega en forma automática a través de un mecanismo que transporta los platos directamente desde la cocina. Queda en Nuremberg.
1 comentario:
Me gusta disfrutar mucho de la gastronomía y por eso es un placer ir a diversos restaurantes en donde pueda disfrutar del maravilloso lugar y la exquisites de los platos. Muchas veces averiguo en los hoteles 5 estrellas acerca de algun restaurante recomendado
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